Bebés recién nacidos, qué esperar

Una de las cosas qué más rabia me dio al leer ‘Un regalo para toda la vida’ es que no tuviera más información específica para recién nacidos. Lo más difícil de la lactancia son los primeros días. Estos primeros días son los más sensibles para que la lactancia termine prematuramente. La madre está emocional por culpa de las hormonas, recibe comentarios más o menos afortunados de gente en la que confía (aunque no tengan formación específica en lactancia o puerperio) y duda de su capacidad como madre en general y como criadora en particular, especialmente si es primeriza. Pero también madres experimentadas, con lactancias exitosas a sus espaldas pueden dudar de si mismas, porque no hay dos lactancias iguales.

El mejor consejo para establecer una lactancia feliz es no restringir el acceso del bebé al pecho. Establecer una buena producción de leche depende de la estimulación que hace el bebé en el pezón. Ayuda a que la leche madura reemplace al calostro antes y evita problemas de obstrucción y mastitis.

También es importante ponerse al bebé al pecho al menor síntoma de hambre. El estar despierto puede ser síntoma de hambre en un recién nacido. Abrir la boca, mover la cabeza hacia un lado, sacar la lengua, morderse el puño y llorar. Estos son síntomas de hambre, en este orden. Y el llanto es un síntoma tardío…

¿Qué es normal los primeros días o semanas?

- Qué el bebé quiera comer cada hora y media o dos horas, especialmente si después descansa cuatro horas de noche. Un recién nacido debería hacer 10 o 12 tomas en 24 horas.

- Es normal que tarde bastante en hacer las tomas, es pequeño, está cansado y mamar es un trabajo duro. No hay que desesperarse, en seguida mejoran y se vuelven rapidísimos, piensa en el tiempo que te ahorras de fregar biberones. Permítele que esté en un pecho todo el tiempo que necesite mientras mame activamente (si se adormece puedes darle un masajito en la mandíbula y la barbilla). Esto pueden ser 20 minutos fácilmente, y después ofrece el otro pecho.

- Es normal (y debes de prestar atención los primeros días para saber que todo va bien) que hagan caquita tantas veces como días de vida tengan hasta el día 4, a partir de ahí 3 ó 4 deposiciones al día es normal y una en cada toma también es normal (y cuenta como caca si es un peillo sucio del tamaño de una moneda de 2 euros).

- Con respecto a los pañales mojados, al menos 6 al día una vez que sube la leche, y antes de eso 1 por cada día de vida es normal.

- Una pérdida de peso del 7% (el 10% puede ser también normal, pero habrá que vigilar de cerca) en los primeros días de vida es normal. Cuando sube la leche lo normal es que un niño de pecho ponga de media 170gr/semana. No se te ocurra pesarlo cada día, o peor aún cada toma, sólo te servirá para volverte loca. Pesarlo sólo en las visitas pediátricas es suficiente. Si todo va bien, TODO va bien, especialmente la lactancia. Si no ha subido de peso lo que debería busca ayuda en el pediatra y en un especialista en lactancia.

Cosas que también son normales

- Es normal que cambie su patrón de alimentación de un día para otro. Lo normal es que quiera pasar mucho tiempo al pecho los primeros días para estimular la transición a la leche madura (y porque le gusta! Es su mejor chupete y acaba de nacer el pobrecito mío) pero una vez que suba la leche pase menos tiempo al pecho.

- Los niños pasan por picos de crecimiento, y es normal que durante 1 ó 2 días estén mucho más tiempo al pecho de lo normal, o que hagan más tomas. Están contándole a tu pecho que necesitan más porque están dando un estirón… Pasa a los 7-10 días, alrededor de las 2 semanas, y entre la semana 4 y 6, y varias veces más adelante.

- Es normal que se junten las todas una vez al día, coincidiendo con la horita mala, o la hora gris, o el rato de llantos y cólicos. Hay un periodo al día, que suele ser el final de la tarde en el que el recién nacido se pone tontuno y se le junta una toma con otra, es normal, y los niños de biberón también tienen su horita mala. Menos mal que tú tienes 2 tetas para que la cosa pase más fácil.

- Es normal que tu bebé no duerma toda la noche de un tirón, ni 6 horas seguidas todas las noches. Es normal que quiera mamar cada 2 horas incluso de noche… Bienvenida a la maternidad!

- Es normal que duelan los pezones. Sí es normal! Y sí, he dicho la palabra tabú de la lactancia. Dolor. Mejor que alguien os avise a que os llevéis el susto. El dolor es una cosa muy subjetiva, y lo que para algunas es molestia para otras es dolor. Una molestia (o sensación dolorosa) al inicio de la toma (coincidiendo con el letdown o bajada de leche) durante unos segundos que después desaparece durante el resto de la toma, es normal. No va a durar mucho tiempo, el pezón está hecho de un tejido muy elástico y a las pocas semanas no hay dolor ni molestia. Pasará y sólo son unos segundos. Más duele llevar a los niños a urgencias con bronquitis y dando el pecho te vas a ahorrar algunas de estas visitas (y esto es una verdad estadística).

Cosas que no son normales

- Que un recién nacido haga 6 tomas en 24 horas no es normal, más te vale ir despertándolo y si está muy dormido (o cansado y hambriento) para mamar, sácate el calostro y se lo das en cucharita.

- Que el bebé quiera estar constantemente al pecho durante todo el día, y que no duerma más de 1 hora seguida para volver a mamar tampoco es normal. Lo más probable es que no se agarre bien y este mamando mal.

- Un dolor intenso durante toda la toma, que te salta las lágrimas no es normal. No seas bruta y busca ayuda especializada.

Si piensas que lo que hace tu bebé de pecho no es normal, puedes llamar por teléfono a tu líder de La liga de la leche y contárselo. Ir a una reunión de lactancia recién parida no es realista, pero puedes hablar por teléfono con ella. Te dirá si es normal o no, y si debes acudir a tu pediatra. O puedes ir a una reunión durante el embarazo, estarán encantadas de verte allí!!

Discos de lactancia... Sorteo cerrado

SORTEO!!!!

Me han regalado para probar unos discos de lactancia de los más chulo que hay!! Los bamboobies. Ya los conocía y estaba deando probarlos, pero hay un problema... Yo no goteo nunca. Casi me dan ganas de gotear para poder usarlos!!!

Están hecho de bambú, fibra natural ultrasuavita. Son super flexibles y la con forma de corazón mucho más ergonómicos que los redondos, apenas se notan si los llevas puestos!! Y el bambú es más absorbente que el algodón así que son más finos que otros discos. 

He decidido que los voy a sortear, así que chicas, animaos que no los venden en España!!! Y es un detallazo para incluirla en la canastilla de una mamá a la espera... Son idealísimos de la muerte!! El ganador recibirá también una muestra de mi crema para pezones de purelan favorita!

Si quieres participar:

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- Si te apetece también nos puedes seguir en Twitter: aquí (no es necesario para participar)

- Dejar un comentario en esta entrada contándonos qué es lo que más te gusta de la lactancia y lo que menos. (Pon el nombre con el que nos sigues en Facebook) 

Bases del sorteo:

- Válido para envíos a España (peninsular) o USA (continental).

- Un comentario por persona.

- El sorteo se cierra el 5 de mayo de 2013 a las 0:00 horas (hora española). El 6 de mayo daré a conocer el ganador (según la herramienta MrRandom.org), y me pondré en contacto con esa persona para mandarle el regalito!!!!  

Mucha suerte a todas!!

Edito:

Cómo tengo algún familiar participando voy a sortearlo según la terminación del número del sorteo extraordinario de la ONCE de esta noche (5 de Mayo de 2012). Si tocase el 0 lo pasamos al día siguiente.

1- Chise
2- Pilar
3- Lau
4- Andrea Sanchez
5- Avencia Arevalo
6- Con M de madre
7- Yarii
8- Luz G
9- Anita

Porque no me tapo

Existen en el mercado una variedad de mantitas, colchas, faldas de camilla para cubrirse cuando una está dando el pecho. En mi opinión llaman bastante más la atención que cuando una madre de forma discreta le da el pecho a su bebé.

Yo no me tapo, primero porque vivo en Miami, y aquí el calor aprieta casi todo el año y no es cuestión de que el niño pase calor. Además a él no le gusta, esta incómodo, se desconcentra… A mi tampoco me gusta no verlo mientras mama. No es que lo tenga que observar en todo momento, pero de vez en cuando me gusta ver cómo va la cosa.

No me tapo porque no estoy haciendo nada malo, ni obsceno, ni oscuro, y no quiero dar la impresión de que es así. No veo a las madres que dan biberón tapándose, escondiéndose, yéndose a otra habitación o retirándose de la mesa. Así que no quiero tomar la decisión de discriminarme por estar dando el pecho.

No me tapo, ni me escondo, ni mi vida se para porque tenga que dar el pecho. A veces, si quiero que el niño se duerma si que busco tranquilidad y un entorno más adecuado. Pero doy el pecho muchas veces al día, y llevo casi 8 meses y pienso seguir haciéndolo muchos meses más. Si tengo que pararme, sacar una mantita y colocármela por encima cada vez que doy el pecho, o buscar un sitio para esconderme, acabaría agotada, y destetaría a mi hijo mucho antes. Dar el pecho debe de ser cómodo!

Y no me tapo porque nunca sabes quién está mirando, y con el simple hecho de verte así, dando el pecho de una forma tan natural, y tan sencilla, sin complicaciones ni complejos, puede cambiar su percepción de la lactancia. Quizá al verme piense ‘Mira que fácil, si ella puede yo también podré’.

Tampoco me tapo porque ya está todo tapado!! Una vez en un restaurante mientras la camarera veía como me disponía a subirme la blusa (debajo llevaba una camiseta de tirantas) y me ponía al niño al pecho me preguntó ‘¿te traigo otra servilleta para cubrirte?’. Tenía una camiseta cubriéndome en torso, una blusa arrugada cubriéndome el escote, un cabezorro de bebé cubriéndome el pecho… Qué me voy a tapar? El centímetro cuadrado de piel que se ve? Ya sería mucho mirar!!! En la playa enseño mucho más que cuando doy el pecho...

Y tú, ¿te tapas?

El placer de la supervivencia (por el padre)

Es sorprendente cómo mi marido forma parte muy activa en la lactancia de nuestro bebé y se ha convertido en un auténtico Taliban de la teta. Yo no llego a esa posición extrema, quizá porque tengo tetas, y él no, porque sé lo duro que puede llegar a ser, porque yo mismo fui una madre de biberón (aunque fueran sólo 3 días) y por que casi no conseguimos una lactancia feliz. Si quieres saber más, aquí.

Hoy os dejo un post que ha escrito el padre de nuestro bebé en defensa de la teta, como derecho del recién nacido. Cómo entender porqué es tan importante para el bebé poder mamar más allá de la bondades de la leche materna.

El placer de la supervivencia

Cuando todo el mundo habla de las bondades de la lactancia, fácilmente se llega a sus bondades “químicas”, sus bondades inmunológicas, sus efectos en la relación materno-filial… yo siempre me pregunto: ¿cómo percibe eso una criatura tan pequeña? Una criatura que no habla, que apenas parece razonar, que es puro instinto?

El bebé y su padre

Cuando trato de analizar los comportamientos y  sentimientos de un bebé, inevitablemente tengo que remitirme a lo más esencial y primitivo del ser humano.  Precisamente porque su balance entre lo aprendido/adquirido y lo instintivo/genético está (imagino) aplastantemente inclinado hacia lo segundo.

Entonces, me gustaría analizar los más grandes y básicos placeres de la vida. Nosotros los adultos, donde el balance entre instinto y aprendizaje está más equilibrado, donde además por nuestro lenguaje sabemos darle nombre a las cosas… definimos los placeres de la vida como cosas que nos gustan, nos apasionan. Me llama mucho la atención dos de ellos, que son muy instintivos por una parte y luego más refinados con el tiempo: el placer de comer y el placer sexual.

¿Me pregunto si no tienen acaso el mismo origen y el mismo fin, cual es la perpetuación del individuo en primer lugar y de la especie en segundo?

Los adultos decimos “nos gusta comer” o “nos encanta el sexo”… creyendo que es fruto del menú de un restaurante o de ver películas picantes. Nada más lejos de la realidad. Estamos programados genéticamente para que nos guste comer y nos guste también el sexo.  Pero esa necesidad absolutamente primaria para la supervivencia del individuo y de la especie, se manifiesta en nuestro cerebro en forma de inmenso placer, que nos atrae y que nos incita a buscarlos insistentemente.

No es absurdo pensar que una necesidad aún más básica y primordial para la supervivencia inmediata del ser humano, que es ser amamantado desde los primeros minutos de vida, se manifieste en el cerebro de nuestro bebé precisamente también como una sensación de inmenso placer. De total paz. ¿Seríamos capaz de ponerle nombre? Orgasmo sería insuficiente…

Esta necesidad, es capaz de hacerse arrastrar a un bebé de minutos de vida, hasta conseguir mamar. Un mandato genético de semejante envergadura, ¿no cabe pensar que en el cerebro del bebé tenga una plasmación placentera de dimensión acorde? Yo mismo he visto los ojos vueltos de mi bebé mientras mamaba… una sensación…. una expresión corporal de auténtico climax!

Pensemos ahora en la privación de semejante placer. En la total frustración de un bebé, que está estableciendo sus primeras conexiones neuronales… que sufrió al ver que donde le prometieron un plato de exquisito valor, que además tiene a la vista y alcance… le engañan con unos burdos polvos de comida  de “astronauta”. Y donde le prometieron el calor y el pezón de su madre le acallaron con una tetina de plástico.

¿Imaginamos que rechazo puede sentir nuestro pobre hijo? ¿Qué impacto puede tener eso ya en su temprana formación de personalidad, de su carácter, del entendimiento del amor, del placer?

Lamentablemente él no lo puede expresar de una manera tan clara, no puede hablar, ni puede escribir este blog... ni puede ponerle nombres como placer o climax. Ni puede decir “pero qué es esto… si lo sé no vengo!”. Pero que no lo pueda decir, no significa que no lo piense, ni lo sienta ni lo padezca. Del placer máximo a la frustración total; gracias a  un trozo de plástico de donde salen unos polvitos mezclados con agua... que gran decepción.

Algunos dirán… “ellos no saben, no se enteran y se olvidan de todo”. Creo que son ignorantes. No hay duda de que ahí está. Lamentablemente, un mandato genético de tan obligadísimo cumplimiento, tan arraigado en nuestro cuerpo, no creo pueda expresarse en otra forma que un inconmensurable placer… y su frustración no puede caer en el olvido, ni pasar desapercibida por mucha edad temprana a la que se produzca. Una insatisfacción semejante, de un placer acarreado genéticamente durante millones de años, no puede pasar sin dejar huella en una mente que está recién empezándose a moldear. Un placer, no solo de satisfacción culinaria, también de atención de la madre, cariño, calor, paz… no puede ser inocuo. Ni puede ayudar a “amueblar” una cabeza, que solo comienza a esbozar sus primeras y más primitivas conexiones.

Estimulación temprana, masajes para bebés y otros artificios

El otro día mi amiga 2.0 Lau quería que le recomendase algún libro sobre masajes para el bebé, yoga infantil, libros sobre estimulación temprana… Esas cosas que nos preocupan tanto a las madres primerizas, y que queremos hacer bien, que alguien (el experto) nos cuente cómo en un libro.

Yo misma quería saber todas estas cosas durante el embarazo. Me apunté a clases de masaje para el bebé, eran 4 sesiones de una hora y media repartidas en 4 semanas, que me iban a convertir en una experta expertísima. Ya me imaginaba yo yendo con mi bebé de 1 ó 2 meses y conociendo a otras madres como yo! Después nació el bebé, odiando la sillita del coche y por ende los viajes en coche ya desde la concepción y cancelé las clases. No había manera de pasar 30 minutos de ida y 30 de vuelta con un bebé llorando hasta ponerse rojo por mucho masaje relajante que le esperase.

La solución fue buscar videos en internet y hacerlo a mi aire. En inglés podrás ver más videos, y tampoco hace falta entender lo que dicen, con ver lo que hacen… Podéis buscar baby massage o infant massage. Os dejo el que más me gustó a mi. No fui a clase pero a mi bebé le gustan y es relajante para los dos que es lo que importa. La clave para que además ayuden a hacer la digestión y sirva para aliviar cólicos y gases es seguir la dirección del colón, es decir, masajear la barriguita en el sentido de las agujas del reloj, y continuar hasta el final de la pierna derecha. Lo de la pierna no tiene mucho sentido para mi, pero ellos son los expertos…

El video de seguí yo 

Para seguir un programa de estimulación temprana, que no precoz, me leí un libro que no está mal. Tampoco es que sea de lectura obligada… No lo recomiendo, pero aquí lo tenéis. Te explica como estimular al bebé y a niños más mayores, con ejercicios específicos para cada edad y para cada tipo de estimulación, distintos sentidos, estimulación sensorial, de las capacidades verbales, etc. Lo más útil que he sacado del libro por ahora (no me lo he leído entero aún) es el guardar los juguetes varias semanas para que el bebé los redescubra y sean un nuevo estímulo. También hacen mucho incapié en presentar distintos estímulos, cambiar los jugetes, que el le niño vea distintas cosas y así procesará su pequeño cerebro en desarrollo más información.

Pero sinceramente no es necesario leerse ningún libro para jugar con tu bebé y que el juego sea estimulante sin que llegue a agobiarlo. Tu bebé te irá haciendo ver qué nivel de estimulación le interesa y hasta donde puede llegar, sólo hay que conocerlo. Cuando la cosa se ponga intensa y empiece a estar sobre-estimulado mirará hacia otro lado o tendrá la mirada perdida y se empezará a estar incomodo, no insistas, será el momento de intentar dormirlo y todos felices. Los recién nacidos tienen estimulación de sobra, no hay que hacerles nada especial, mejor evitarle más estímulos. Además la aplicación de BabyCenter para bebés está muy bien y te propone actividades para cada edad con las cosas comunes de casa, así no te gastas dinero en libros ni en juguetes. Y un último consejo, no pongáis a vuestros bebés delante de la tele! De esto ya hablaré en otro post. Pero os adelanto que no es una vía de estimulación sana para un bebé de menos de 2 años, ni BabyEinstein ni nada. Y por no sana me refiero a que puede tener consecuencias en la salud del niño a largo plazo, no lo digo yo, lo dice la Asociación Americana de Pediatría.

Con respecto a las clases de estimulación, o de yoga para bebés, o lo que por aquí llaman Mammy&me clases, las he probado (gratis) y son una tontería extrema! Y para ver claramente lo ridículo que puede llegar a ser os propongo que veáis el documental Bebés. Yo antes de verlo pensaba que iría a esas cosas y que están muy bien pensadas. Pero al verlo cambié de opinión! No pensaba ir, una amiga me convenció y como era gratis lo probé, y me reafirmo es ridículo.

En este documental hacen el seguimiento de varios bebés en distintos puntos del mundo con culturas totalmente distintas. Cuando ves cómo es el aprendizaje natural sin programas de estimulación de los bebés de Africa y Mongolia y lo comparas con las clases de padres y bebés en habitaciones pintadas de colores cantando y moviendo los brazon como dice una monitora en Japón o USA no puedes más que reírte. Qué ridículo!!! Os recomiendo que lo veaís, por esto y por mucho más!!! Os dejo el tráiler!

Trailer de BABIES 

Lo más impactante es la tía de Mongolia que recién parida se monta en la moto y a correr… Que dolor de puntos!!!

En definitiva, todas estas cosas son producto del marketing de la sociedad de consumo en la que vivimos. Conoce a tu bebé, pasa tiempo con él, juega con él, disfrutalo y tendrá toda la estimulación que necesita ¿Qué opináis de la estimulación temprana? Yoga para bebés? Masajes?

El club de la media teta

Así es como llama mi madre a las que, como yo, damos un pecho por toma. Para mi este es el club de la teta entera! Mi madre sería del club de las 2 tetas, lo de media teta me parece raruno, pero ya me he acostumbrado al nombre!

Da exactamente lo mismo da un pecho por toma o los 2, no defiendo ni lo uno ni lo otro. Podría hablar de la leche del principio y la leche del final, pero la investigación más reciente empieza a poner esta teoría en duda, ya veremos los cambios que hace Carlos González en su próxima revisión de ‘Un regalo para todala vida’. Aunque para la nutrición del bebé da lo mismo una que dos, mi me resulta más cómodo lo de la media teta, aunque como todo, tiene sus ventajas y sus inconvenientes…

Inconvenientes

1. Tienes que acordarte de cuál fue la de la última toma. Es decir, que tienes que ofrecer el pecho que toca. Podría decir que hay sistemas de lazos, y clips, que te puedes hacer el tuyo propio cambiarte el anillo, el reloj… Todo mentira, a la hora de la verdad no haces nada de eso, especialmente si vas con prisa o das el pecho en la calle, el súper o donde te pille. Yo lo intenté un par de días y al final funciona mejor hacer memoria, o ver (tocar) cual está más llena. Esto no es del todo específico de la media teta, si das las 2 tienes que ir alternándolas para ofrecer primero la última de la toma anterior, pero llegamos al segundo inconveniente…

2. Si te equivocas de teta en la toma atente a las consecuencias. Si das los 2 pechos por toma equivocarte no tiene mayor importancia. Es bueno que al menos 1 pecho se vacíe por completo en cada toma y que sean pechos alternos en tomas consecutivas. En el club de la media teta equivocarse es fatal… Muy probablemente el bebé se quede satisfecho incluso si había menos leche de la que él esperaba (ya pedirá de nuevo) pero la asimetría en tus pechos se hará patente. El día de las primeras vacunas me pase 3 tomas a pecho derecho, para no fastidiarle su piernita dolorida, y parecía un alien! Aunque no hubo obstrucción.

3. Puede que vayas por la vida algo descompensada. Cuando se va acercando la toma crece la asimetría, y si la toma se retrasa más de lo habitual la diferencia es clara…

4. No dispones del maravilloso momento del 'entreteto'. Esos minutos entre teta y teta que aprovechas para flatos y cambio de pañal y así tras la segunda teta el niño se duerme y todos felices. Este ratito es especialmente útil durante la etapa de recién nacido. Pero es fácilmente imitable si vuelves a ofrecer la misma teta tras el cambio de pañal!

Ventajas

1. Terminas mucho antes con la toma. Una sola teta, una bajada de la leche o ‘let down’ (puede que 2 si tu bebé es un mamoncete) y listos!

2. Dejas a uno de los pezones descansar en cada toma. Esto es vital si tienes dolor, grietas, rojeces… Le das descanso al pezón para que pueda cicatrizar, para mi fue la noche y el día para evitar gritas en el pezón. Fue pasarme al club de la media teta y no volver a tener dolor (y antes si que tenía…)

3. Es mucho más discreto para dar el pecho en público. Solo un lado, nada de ir moviendo al nene de un lado a otro! Además de la velocidad...

4. Aumentas la capacidad de almacenamiento de leche. Para las que tengan la mosca detrás de la oreja de ‘no tengo suficiente leche’ siempre tendrán la tranquilidad mental de tener la otra teta por si acaso. No es que aumentes la producción de leche (vas a producir la misma), lo que aumentas es tu capacidad de almacenaje. Aunque lo más probable es que si le ofreces la teta extra termine echando leche con el flato, lo que sobra para fuera!

5. Para las tomas nocturnas es practiquísimo. Te metes al niño en la cama del lado que toca y a dormir! Cuando termina él ya sabe lo que hay que hacer. Nada de esperar despierta a que acabe con una teta para ofrecerle la segunda.

Os he convencido!? Os venís al Club de la media teta?